Un deseo es muy probablemente lo más parecido a un volado: no sabes si será águila o sol; es algo a lo que te aferras y que el destino, termina por decidir lo que te toca.
Los deseos no son más que una esperanza muda, son palabras humedecidas en melancolía al futuro metidas en un sobre que dice "suerte".
Sin embargo, sé que son un proceso de la mente, un mecanismo que consiste en soñar, despierto o dormido, pero se sueña. Ergo, podemos concluir que los deseos, también son electroquímica.
Y el poeta diría: Es lo que te sale del corazón, y que se sale al universo, es cosa de los componentes de éste, que el deseo permanezca como tal, o se vuelva realidad.
En el año nuevo, acostumbramos desear mientras masticamos doce uvas, un deseo por cada frutita, entonces concluyo: los deseos son doce uvas, hay que tomar en cuenta la madurez, dulzura, tamaño e incluso esos pequeños obstáculos que nos permiten morder a gusto, llamados semillas, así entonces tenemos algo más completo, un deseo puede ser dulce, grande y sin semillas... aunque sin semillas, no hay nacimiento...
Es fuerza, es algo primitivo, un nacimiento sin explicación.
Y mis deseos para el 2009 van para todo colaborador y lector de este blog, ojalá lean ese libro que los cambie, que salga la película que los haga reír como ninguna, que encuentren algo positivo de los que los rodean, que le saquen una sonrisa a alguien y sobre todo salud.
JF.
roco:
Muchas veces los deseos así como la esperanza no son mas que las piedras que llevan al camino de la infelicidad, yo muchas veces he deseado, frente al mar, enmedio de una noche abrumadora, en el ojo de la tormenta, ahogado en una paz mortal. He deseado tener a algunas mujeres, mas que nada en el mundo, he deseado tener salud, esa siempre la he tenido y tendré, también la felicidad, algún estóico por ahí dijo alguna vez "la vida es una constante melancolía, salpicada de felicidad" por eso concluí por dejar de desearla.
Un deseo es una puerta a la esperanza, y un corredor hacia la desesperación. Un deseo es una luz que se encuentra guiándonos en la oscuridad, es una claridad que solo acentúa la oscuridad en la que vagamos.
Eso no significa que no se cumplan los deseos, en muchos casos se cumplen, el problema es que no sabemos desearlos. Hay que ser exactos, y aceptar las consecuencias de nuestros deseos, yo alguna vez pedí volver a llorar (pues llevaba 3 o 4 años sin hacer) y la vida me lo cumplió, y así hace un año empezó el periodo mas oscuro de mi vida, por suerte eso ya paso y ahora soy mas sabio, y entiendo que muchas veces solo cabe desear que las cosas sucedan como deben ser. Los deseos si se cumplen, pero no siempre en el momento, o de la forma que nosotros esperamos, eso me lleva a otro punto, no hay que esperar nada de la vida, hasta cierto punto, ser ataráxico...
Me gusta pensar que los deseos, junto con la esperanza, la alegría, la tristeza y la ira son los condimentos de la vida. Todo sería muy insípido si canceláramos todos estos sabores. Vivamos la vida mezclada con todo un poco. que muchas veces uno llega a la ataraxia, o al budismo, o a alguna otra rama que anestesie nuestros sentimientos por miedo al dolor. No tengamos miedo a desear, ni a la desilusión, hay que ser realistas, las cosas pasaran como deban pasar, muchos de nuestros planes solo serán decoraciones barrocas adornando nuestro destino...
R.
Los deseos no son más que una esperanza muda, son palabras humedecidas en melancolía al futuro metidas en un sobre que dice "suerte".
Sin embargo, sé que son un proceso de la mente, un mecanismo que consiste en soñar, despierto o dormido, pero se sueña. Ergo, podemos concluir que los deseos, también son electroquímica.
Y el poeta diría: Es lo que te sale del corazón, y que se sale al universo, es cosa de los componentes de éste, que el deseo permanezca como tal, o se vuelva realidad.
En el año nuevo, acostumbramos desear mientras masticamos doce uvas, un deseo por cada frutita, entonces concluyo: los deseos son doce uvas, hay que tomar en cuenta la madurez, dulzura, tamaño e incluso esos pequeños obstáculos que nos permiten morder a gusto, llamados semillas, así entonces tenemos algo más completo, un deseo puede ser dulce, grande y sin semillas... aunque sin semillas, no hay nacimiento...
Es fuerza, es algo primitivo, un nacimiento sin explicación.
Y mis deseos para el 2009 van para todo colaborador y lector de este blog, ojalá lean ese libro que los cambie, que salga la película que los haga reír como ninguna, que encuentren algo positivo de los que los rodean, que le saquen una sonrisa a alguien y sobre todo salud.
JF.
roco:
Muchas veces los deseos así como la esperanza no son mas que las piedras que llevan al camino de la infelicidad, yo muchas veces he deseado, frente al mar, enmedio de una noche abrumadora, en el ojo de la tormenta, ahogado en una paz mortal. He deseado tener a algunas mujeres, mas que nada en el mundo, he deseado tener salud, esa siempre la he tenido y tendré, también la felicidad, algún estóico por ahí dijo alguna vez "la vida es una constante melancolía, salpicada de felicidad" por eso concluí por dejar de desearla.
Un deseo es una puerta a la esperanza, y un corredor hacia la desesperación. Un deseo es una luz que se encuentra guiándonos en la oscuridad, es una claridad que solo acentúa la oscuridad en la que vagamos.
Eso no significa que no se cumplan los deseos, en muchos casos se cumplen, el problema es que no sabemos desearlos. Hay que ser exactos, y aceptar las consecuencias de nuestros deseos, yo alguna vez pedí volver a llorar (pues llevaba 3 o 4 años sin hacer) y la vida me lo cumplió, y así hace un año empezó el periodo mas oscuro de mi vida, por suerte eso ya paso y ahora soy mas sabio, y entiendo que muchas veces solo cabe desear que las cosas sucedan como deben ser. Los deseos si se cumplen, pero no siempre en el momento, o de la forma que nosotros esperamos, eso me lleva a otro punto, no hay que esperar nada de la vida, hasta cierto punto, ser ataráxico...
Me gusta pensar que los deseos, junto con la esperanza, la alegría, la tristeza y la ira son los condimentos de la vida. Todo sería muy insípido si canceláramos todos estos sabores. Vivamos la vida mezclada con todo un poco. que muchas veces uno llega a la ataraxia, o al budismo, o a alguna otra rama que anestesie nuestros sentimientos por miedo al dolor. No tengamos miedo a desear, ni a la desilusión, hay que ser realistas, las cosas pasaran como deban pasar, muchos de nuestros planes solo serán decoraciones barrocas adornando nuestro destino...
R.
Lo mejor de esta pregunta es que la verdad nunca me había puesto a pensar que es un deseo para mí. La primera idea que me viene a la mente, es supongo la idea que todos tenemos, un deseo es algo que queremos, aunque normalmente los deseos son cosas imposibles de alcanzar, pero puede que lleguen a impulsar a alguien para alcanzar algo no tan fantasioso como lo deseado. Realmente los deseos son cosas en las que la verdad si creo, todo el mundo a deseado cosas, a lo mejor nunca se cumplen pero si creo en los deseos, por ejemplo, antes de morir desearía poder ver al conejo de trix (el cereal) le quite su comida a esos niños y pueda comer un poco de cereal.
JP.
Un deseo, es el pensamiento resultante de una necesidad o de un capricho, deseamos cuando nos sabemos (al menos en un principio) incapaces para hacerlo por nosotros mismos, las causas de nuestra incapacidad de lograrlo pueden ser infinitas y esto nos da vuelo a desear, creo que lo importante de los deseos es la esperanza que puedan albergar y en algún punto su capacidad de volverse reales es la pauta de de cuanta esperanza le ponemos al deseo.
Es la línea entre “tan solo esperar” y “querer mas allá”, es a veces un impulso que nos mueve a dar más por el mismo deseo, en una idea intangible y está en su intangibilidad el seguir siendo deseo, puede tener todos los adjetivos, puede ser tan grande e imposible como el que desea lo quiera, al final es una de esas cosas que se nos permite como especie, nos caracteriza nuestra capacidad de desear, al ser algo tan subjetivo solo podría permanecer al humano. Entonces pues pongámonos a desear y cada quien sabrá qué tanto de su realización se lo dejan al azar, en eso radica nuestro afán de volver a desear.
Feliz año nuevo y que se cumplan todos sus deseos.
E.
No hay comentarios:
Publicar un comentario